viernes, 14 de septiembre de 2007

La polonización o balcanización de Bolivia

Oscar Garrido Gómez
Septiembre 14, 2007

En los últimos días se han escuchado la voz de los enemigos de Bolivia, repitiendo con alarmante frecuencia argumentos para la destrucción de Bolivia.

La primera ves que se se escucho esto fue en la década de los 1860 cuando como resultado de la expulsión del embajador británico por parte de Mariano Melgarejo, la reina Victoria decreto que "Bolivia no existe". haciendo publicar mapas de Sudamérica en la que el territorio boliviano estaba distribuido entre todos sus vecinos. Mapas que son ahora costosos ítems de colección. Cabe observar que Bolivia ha sido mutilada por guerras de conquista en 3 oportunidades perdiendo el 50% de su territorio a Brasil, Paraguay y Chile.

Otra ocasión en que se habló de la supresión de Bolivia fue durante el primer gobierno de Hernán Siles Suazo, cuando la revista norteamericana Time propuso la "polonización" de Bolivia entre sus vecinos. La revista consideraba que un país que vivía en un caos permanente, y donde se había derrumbado la economía con la reforma agraria y la nacionalización de las minas, lo que le obligaba a vivir de la caridad internacional, no debía mantenerse independiente ya que con ello sólo perjudicaba a sus propios habitantes.

Una opinión similar la sostuvo el general Augusto Pinochet cuando afirmo que Bolivia carecía de viabilidad como nación y que la mejor solución sería que su territorio fuera distribuido entre Chile, Perú Brasil y Argentina. O sea una “polonización”, aludiendo al pacto Hitler-Stalin, que en 1940 se repartieron Polonia entre la URSS y Alemania.

Algunas partes de estos augurios fueron repetidos en diversas coyunturas por políticos neoliberales como el genocida Gonzalo Sanchez de Lozada que afirmaba que Bolivia es un país inviable, opinión que no evito que postule para ser presidente de justo ese país inviable. Durante los años del neoliberalismo y a causa del saqueo que sufría el país fueron muchos politólogos que afirmaban lo mismo, una mentira que se repitió tantas veces cosa que muchos llegaron a creer que era verdad, Bolivia un país inviable. La primera declaración de Sanchez de Lozada luego de huir de Bolivia fue que el pensaba que Bolivia había iniciado un proceso de "balcanización" refiriéndose a la división que hubo en la ex-republica yugoeslava.

La imponente victoria electoral del MAS dirigido por Evo Morales marca el inicio del fin del saqueo neoliberal en Bolivia. Los sirvientes de los saqueadores completamente derrotados en las urnas, agarran lo que pueden para evitar perder las migajas que recibían de sus patrones. Uno de sus asideros es precisamente la idea de la división de Bolivia. El imperio no pierde su tiempo y nombre como embajador en Bolivia a su experto en la "balcanización" y "limpieza étnica", Philip Goldberg. Su influencia no se dejo esperar y la "nación camba" del croata Marinkovic con su grupo de choque, su SS personal: la unión juvenil cruceñista abiertamente hablan del separatismo con alto contenido racista. Reyes Villa ex capitán de ejercito vinculado a las dictaduras de Banzer y García Meza, sistemáticamente evita las soluciones pacificas y busca crear condiciones de un enfrentamiento a escala nacional. Los medios de información, emisoras de televisión, prensa escrita en manos de las oligarquías se suman a una campaña de desinformación en una clara guerra psicológica al estilo típico de la CIA.

El mes pasado se volvieron a escuchar esas voces enemigas de Bolivia, primero fue el ex-presidente de Colombia Ernesto Samper que afirmo que el único país del continente donde existe "la amenaza real de secesión" sería Bolivia. Opinión que inmediatamente fue apoyada por las declaraciones del alcalde de Santa Cruz, Percy Fernández, que propuso la división de Bolivia en la "nación del oriente" y la "nación del occidente".

Toda esa campaña para destruir el país no puede triunfar, por la sencilla razón de que esos pronósticos apocalípticos no tienen asidero real. Los bolivianos tenemos conciencia de la realidad del país, no vemos problemas en nuestra diversidad cultural, somos un pueblo pacifico y tenemos la cultura del dialogo. Todos los bolivianos cambas, collas, chapacos, estamos unidos, esa unión es tan fuerte que podemos afirmar que Bolivia es indivisible.

Los problemas que tenemos no son los problemas artificiales introducidos por los traidores como el tema de la capitalidad, nuestros problemas son la mala nutrición, nuestros problemas de salud, nuestros problemas de educación, nuestros problemas de infraestructura. Todos esos nuestros verdaderos problemas tienen soluciones y son esos son los problemas que se debería debatir. Y ya que nuestros problemas son solubles, eso implica que a pesar de lo que digan Bolivia es un país viable.

Como boliviano, les digo a los enemigos de mi patria: "A polonizar o balcanizar a su abuela CARAJO".

2 comentarios:

Lukas Homola dijo...

te financian para hablar mal solo de la oposicion?

KiRKiGaN dijo...

No, de hecho he escrito muchos artículos donde critico al gobierno.