El gobierno considera declarar “persona no grata” al embajador de EEUU

Red Erbol
Octubre 15, 2007

La Paz, 15Oct. (Erbol).- El gobierno izquierdista de Bolivia está a punto de declarar “persona no grata” al embajador de Estados Unidos, Philip Goldberg, y, de ese modo, lograr su cambio, revelaron al Periódico Digital Erbol fuentes vinculadas al gobernante Movimiento al Socialismo (MAS).

“Declarar a un embajador como “persona no grata” significa en lenguaje diplomático pedir su cambio, pedir su remoción por otra persona, por otro representante que debe ser nominado, en este caso, por Washington; quiere decir que debe abandonar el territorio nacional en un plazo que debe ser determinado por el país que hace la declaración, puede ser 24, 48 ó 72 horas”, explicó una persona entendida en relaciones exteriores y que actualmente trabaja en la Cancillería boliviana.

Según las normas de relaciones exteriores, “por principio de reciprocidad el embajador de Bolivia en Estados Unidos (Gustavo Guzmán) deberá volver al país”, en una señal de protesta y “permanecer en territorio nacional mientras el gobierno de George Bush nombre a otro”.

La medida diplomática ronda por Cancillería y Palacio después que el presidente Evo Morales lo declaró “interlocutor no valido” y prohibió su ingreso a la Casa de Gobierno, mientras no pida disculpas al pueblo boliviano por haber “ironizado” la solicitud del mandatario de “cambiar la sede de Naciones Unidas”.

Hace días, Goldberg declaró que Evo Morales pedirá la próxima vez el “cambio de sede de Disneylandia” en respuesta a la solicitud que hizo el Jefe del Estado por el “mal trato” que recibió la delegación boliviana en Estados Unidos cuando viajó a la última Asamblea de Naciones Unidas, celebrada, precisamente, en el país del norte, sede de la ONU.

Tres “notas verbales”
De acuerdo con fuentes oficiales, las relaciones entre Bolivia y Estados Unidos llegaron al “extremo” debido a que Philip Goldberg ya recibió tres “notas verbales”, que en lenguaje diplomático equivale a “tres cartas escritas”, y ya fue convocado por el vicecanciller Hugo Fernández en más de cinco ocasiones, la última vez el viernes 5 de octubre.

La diplomacia señala que cuando un representante extranjero llega a esta situación es que las relaciones no están muy bien, aunque, Goldberg en la última visita a Fernández entregó una carta en la que señala que con sus declaraciones referidas a la “sede de Disneylandia” no ha querido “ofender” ni al Presidente ni al pueblo bolivianos y que su intención era solamente “distensionar” el mal ambiente para mantener las buenas relaciones entre ambos países.

En lenguaje diplomático esta carta puede ser considerada como una retractación de parte del embajador de Estados Unidos. Sin embargo, autoridades del gobierno boliviano consideran que no es suficiente y que el mejor camino para resolver las tensas relaciones entre Estados Unidos y Bolivia es que Goldberg se vaya del país.

“No será muy fácil, de por medio hay temas como el ATPDA, la Cuenta del Milenio”, advirtió otra fuente.

Intervención en asuntos internos
Las relaciones entre los embajadores de Estados Unidos y Bolivia casi nunca fueron cordiales. La embajadora estadounidense Donna Hrinak pidió, en una ocasión, al gobierno boliviano “cojones” para enfrentar la lucha contra el narcotráfico y la erradicación de los cocales, mientras que su colega Kurtis Kamann vetó a militantes miristas vinculados al narcotráfico para evitar que sean parte del último gobierno de Hugo Banzer Suárez.

Manuel Rocha fue más allá en 2002, días antes de las elecciones nacionales, cuando pidió a los bolivianos no votar por el candidato Evo Morales Ayma, quien subió en la preferencia electoral gracias a esa declaración y logró ubicarse en el segundo lugar, después de Gonzalo Sánchez de Lozada (MNR).