Noviembre 7, 2007
El Vicepresidente disuelve el Comité Político luego de que el Comité Interinstitucional de Chuquisaca rechazara su última propuesta para resolver la disputa por la capitalía
Los dirigentes del Comité Interinstitucional de Chuquisaca calificaron como una “burla” y rechazaron la última propuesta que hizo el Consejo Político para resolver la disputa por la sede de los poderes Ejecutivo y Legislativo. El Vicepresidente Alvaro García Linera disolvió el Consejo y denunció que grupos políticos minoritarios ultrarreaccionarios “secuestraron” a la Asamblea Constituyente.
Dirigentes de instituciones chuquisaqueñas convocaron a la movilización y nuevamente advirtieron que la Asamblea tendrá garantías para funcionar sólo si discute en sus sesiones oficiales el diferendo por la capitalidad plena. Declararon que la propuesta de la suprapartidaria, que consta de ocho puntos, no es aceptable pues la demanda de capitalidad plena es “irrenunciable”.
El Comité conformado por representantes de las principales fuerzas políticas, a la cabeza del Vicepresidente, propuso reconocer a Sucre como capital constitucional, ofreció que sea la sede de un Cuarto Poder (integrado por la Corte Nacional Electoral y el Registro Civil), de la Procuraduría y de un Tribunal de Enjuiciamiento de autoridades judiciales. Planteó también institucionalizar en Sucre sesiones de Congreso de inauguración, honor, clausura, juicio de responsabilidades, nombramiento de autoridades del Poder Judicial y reformas parciales a la CPE.
La propuesta no le quita nada a nadie, pues no puede haber institucionalidad democrática y justicia quitándole cosas a una región, dijo el Vicepresidente, quien advirtió que el rechazo de la oferta por algunos dirigentes de Sucre marca un camino peligroso.El Segundo Mandatario lamentó que la Constituyente, que fuera proyectada como el gran escenario de encuentro entre grupos, clases y etnias, haya sido “secuestrada y chantajeada por algunos dirigentes intransigentes e irresponsables, por Podemos que hizo todo lo posible para sabotear e impedir acuerdos, que entró al Consejo sólo para sabotear y no movió un solo dedo para buscar consensos”.
García Linera decidió como Vicepresidente suspender el funcionamiento del Comité Político, que logró establecer el 85 por ciento de la nueva Carta Magna en base a acuerdos, y anunció que presentará informe a la Directiva de la AC a primera hora de este miércoles.La pequeña minoría conformada por asambleístas de Podemos, un reducido grupo de empresarios cruceños y dirigentes del Comité Interinstitucional de Chuquisaca cierran las puertas de la única instancia democrática construida con la sangre del pueblo para resolver diferencias y desigualdades en el país. “La Constituyente está secuestrada, chantajeada y presionada por una alianza circunstancial de esas tres minorías”, dijo.
Si se cierra la Asamblea por obra de estas minorías políticas y empresariales, la mayoría será libre de tomar decisiones mucho más radicales en cuanto a la democracia, la propiedad y la distribución de la riqueza. Al haber boicoteado el único escenario del diálogo en democracia, la minoría ya no tendrá el derecho histórico de reclamar diálogo.
Ahora la Asamblea está en manos de la directiva de la Constituyente, que en los siguientes días tomará la decisión de dónde y cuándo se reanudan sesiones. Pero la Asamblea queda fundamentalmente en manos del pueblo boliviano, que sabrá encontrar el mecanismo para liberar a la Asamblea Constituyente de este chantaje de algunos sectores empresariales y políticos “ultra conservadores, reaccionarios, racistas y fascistas”, afirmó García.
Los dirigentes de Podemos acusaron al Vicepresidente de ser el responsable directo del fracaso del diálogo haber interferido y dirigido desde el Palacio de Gobierno y la Vicepresidencia los asuntos de la Asamblea.“Queremos decirle al Vicepresidente, respetamos su envestidura, pero él no es quien para decir cuando se acaba el diálogo, el diálogo tiene que seguir entre los asambleístas que son a quienes se eligió para que decidan los asuntos de la Asamblea. Lamentamos y rechazamos sus amenazas, tampoco nos va a amedrentar y también lamentamos su llamado a la violencia, cuando lo que debería hacer es permitir que la Asamblea funcione en el marco de la Constitución y la ley y pueda haber diálogo entre los asambleístas para llegar a puntos de acuerdo”, declaró el senador de Podemos Oscar Ortiz.
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